Esta acuarela del 2018 se llama “Amanecer en la tierra de los esfuerzos”.
El nivel que tiene cada uno de ustedes cuando muestran sus trabajos, para mi tiene una importancia cero. Yo tomo el esfuerzo y el avance de cada alumno en relación a ustedes mismos, y no al resto del grupo.
No confundamos estudiar en grupo con sobresalir o destacarse. Lo mejor que pueden hacer es competir con ustedes mismas/os, ponerse un objetivo chiquito cada semana y buscar la manera o los recursos para alcanzarlo. Los demás también están batallando con sus cosas.
Y lo que desde afuera se ve como un paseo agradable de arte y armonía, el otro lo puede estar viviendo con mucha exigencia también. Porque somos humanos y nos pasan las mismas cosas.
El que tiene talento, si se esfuerza, alcanza la excelencia.
El que no tiene demasiado talento, si se esfuerza mucho, también alcanza la excelencia.
Y como es de esperar, el que no se esfuerza, sin importar su configuración genética, se queda viviendo en la fantasía.
Asi que busquen aquello que les dé placer, para que el esfuerzo sea más parecido a un juego que a una tortura. Practiquen alquellos motivos difíciles pero posibles.
Exíjanse más conciencia que resultados. Una vez alineados con el estado presente, el cuerpo se desbloquea y hace su magia
Si las cosas no salen al principio, la acuarela te va a mostrar el camino a mejorar. No siempre lo hará amablemente, pero siempre será honesta con vos. Escuchala, no te escudes detrás de la crítica destructiva, mirá el error a la cara. Eso sos vos ahora, perfecta/o en tu imperfección, en permanente cambio. Extraé mentalmente una muestra de ese error, y practicalo en un papel suelto. Obsesionate con eso, y con nada más. Y cuando hayas entendido mental y en el papel como corregirlo, retomá los motivos más grandes.
“No temo a quien practica 1000 patadas diferentes. Temo a quien practica 1000 veces una única patada” Bruce Lee”